viernes, 31 de mayo de 2013

CONTACTO CON UN OVNI REAL. EL NIÑO QUE FUE AGREDIDO POR UN OVNI



CONTACTO CON UN OVNI REAL, EL NIÑO QUE FUE AGREDIDO POR UN PLATILLO EN 1977, MUY INTERESANTE ENTREVISTA CON IKER JIMENEZ

sábado, 25 de mayo de 2013

OVNIS EN TORNADOS DE OKLAHOMA




Una serie de objetos voladores no identificados (OVNIS) Fueron captados por las cámaras de un canal de televisión local de estados unidos sobrevolando Oklahoma durante el paso de los tornados.

¿Un ovni sobre un granero de California?

Un ovni ha sido avistado en el cielo cerca de un granero histórico en la ciudad Santee, en el estado de California, desatando la curiosidad de los residentes de la zona, que no se explican el origen del objeto.
En busca de respuestas la cadena estadounidense New10 entrevistó a Ellen Henry, la autora de la foto, que está segura de que lo que ella logró captar con su cámara el pasado 7 de mayo "no es de este mundo". Henry también descarta que el objeto sea el resultado de un fallo técnico de su cámara.
 
"Está claro que no fue un error [de la cámara]", explica Henry señalando que otras fotos salieron sin defectos. 

Además la mujer informó que su cámara dejó de funcionar del todo después de ese día.  

News 10 también se ha puesto en contacto con los aeródromos cercanos donde despegan y aterrizan aviones que sobrevuelan el granero, y aseguran que el objeto no es ninguna de sus aeronaves.

Henry cree que el objeto de la foto no puede ser un avión ni un drone. "De ninguna manera puede ser un avión comercial. Lo habría escuchado, sobre todo si iba tan bajo como aparece en la foto. Alguien mencionó que podría tratarse de un avión no tripulado. Pero nunca he visto ningún drone que sea redondo u ovalado, y sin alas, timones o hélices", subraya Henry.




sábado, 18 de mayo de 2013

EL VATICANO CONFIRMA POSIBLE EXISTENCIA DE VIDA EXTRATERRESTRE




A través José Gabriel Funes, director del Observatorio Vaticano, la iglesia católica reconoce que sí es posible la existencia de vida fuera de la tierra, y acepta que Seres extratererrestres visiten la Tierra en los objetos por ellos tripulados a los que de manera inapropiada se les ha denominado como OVNIS (Objetos Voladores No Identificados). 

 Lo que para cualquiera sería un progreso de la iglesia la aceptación de esta realidad, esto más bien acarrea confusión; ya que entonces podemos asegurar que injustamente fue juzgado Galileo Galilei, y todos aquellos que en cierto momento se presentaron ante la jerarquía del catolicismo con evidencias, y fueron ignorados o asesinados.

jueves, 16 de mayo de 2013

Ex militar de EE.UU. reconoce que avistó a dos ovnis y dos extraterrestres en Canadá

Un militar retirado estadounidense reveló los detalles de su encuentro con los extraterrestres, que tuvo lugar en la década de 1950, pero que permanecía en secreto hasta ahora.
El teniente coronel de la Fuerza Aérea, Richard French, era por aquel entonces uno de los investigadores principales del llamado 'Proyecto Libro Azul' y su trabajo consistía en desmentir falsos informes sobre ovnis, así que no podía ni imaginar que un día acabaría viendo a dos extraterrestres realizando reparaciones en su nave.

 Lo primero que vi fueron los ovnis, y era evidente para mí que estaban haciendo algo con la nave”


Un día los superiores del militar recibieron un informe sobre dos ovnis, avistados por muchos residentes de la ciudad canadiense de San Juan de Terranova, y ordenaron que French investigara el caso.

Al llegar al lugar de los hechos, el teniente coronel vio a una multitud de personas, incluyendo varios policías locales, mirando con asombro en el agua.

French recuerda que el agua estaba muy clara y pudo ver a unos 20 metros de la costa dos naves circulares, cada una de unos 5,5 metros de diámetro y casi un metro de espesor, flotando debajo de la superficie del agua. Además vio a dos seres junto a las naves.

"Lo primero que vi fueron los ovnis, y era evidente para mí que estaban haciendo algo con la nave”, contó el ex militar al diario 'Huffington Post', aunque reconoció que no pudo ver claramente los detalles.

La parte superior de la cabeza era mucho más amplia que la línea de la mandíbula, los ojos eran muy inclinados y no se podían ver pupilas en ellos"


Los dos seres en cuestión "eran de unos 2 o 3 pies de altura [de 0,6 a 0,9 metros], de color gris claro, muy delgados, brazos largos, con dos o tres dedos”, indicó French. “La parte superior de la cabeza era mucho más amplia que la línea de la mandíbula, los ojos eran muy inclinados y no se podían ver pupilas en ellos", continuó el militar precisando que se parecían a los extraterrestres de las películas.

Después, contó French, una de las naves subió a la superficie y se marchó. Unos 20 minutos después volvió para luego desaparecer otra vez, junto con el otro ovni.

Irónicamente, el trabajo de French en aquella época era el de refutar las historias sobre ovnis, por lo que presentó un informe ficticio, en el que consideraba a las naves como algo desconocido, “algún tipo de vehículo extranjero o irreconocible”.

"Oh, creo que sin duda se trataba de un ovni y creo que había extraterrestres a bordo", confiesa French ahora. "No hay duda en mi mente de que eran exactamente lo que eran, y mi deber fue desacreditar la historia, así que hice todo lo posible para hacerlo"


http://actualidad.rt.com/ciencias/view/94426-extraterrestres-ovni-eeuu-militar

domingo, 12 de mayo de 2013

Louis Caparat....o el Pacto Extraterrestre


En 1987 el egiptólogo francés Louis Caparat comenzó las negociaciones con el gobierno egipcio con la intención de llevar a cabo una serie de excavaciones en la Gran Pirámide de Keops.

La razón era un tanto pedante:

Caparat afirmaba que todavía no se habían descubierto las habitaciones más importantes de la pirámide. Solo él y sus tres ayudantes podrían excavar allí y acceder a los tesoros ocultos.

El ministro de educación y el canciller francés de aquel entonces exigieron algún tipo de prueba.

Caparat llevó al estrado una serie de planos y manuscritos en donde se afirmaba -de cierto modo- que entre los sitios descubiertos desde principios de siglo hasta la década del 80 existían ciertas zonas en gris. Estos lugares no pudieron ser accesados por los anteriores arqueólogos.

Así mismo, Caparat presentó una carta de una empresa norteamericana que ponía a disponibilidad una moderna máquina excavadora, lo cual ayudaría de sobremanera en el trabajo. El ministro pidió una semana de receso en las conversaciones.

En el invierno del 88, Caparat y sus asistentes excavaban ya en Keops. Se le concedió el plazo de cuatro meses con posibilidad de extender el tiempo si se llegaba a encontrar algún indicio. El trabajo fue preciso y llegó a agotar al arqueólogo. No obstante, la tajante persistencia fue su mejor consejero. Día a día avanzaban con rapidez.

La excavadora americana funcionaba con increíble acierto. Llegó a trabarse en algunos tramos.

Al poco tiempo, uno de los ayudantes de Caparat - Ernest - comenzó a tener cierto malestar en el pecho. No podía ingerir alimento alguno. Vomitaba de forma extraña, no lograba conciliar el sueño y se quejaba cuando le tocaban. Una sugerente marca roja le rodeaba el cuello.

El arqueólogo le acompañó hasta el hospital más cercano. Para su mala suerte debieron internarle. Los médicos le examinaron. Al parecer sufría de un virus no identificado que atrofiaba los conductos internos de los pulmones.

Las fosas nasales emanaban gran cantidad de flemas de un color rojizo.
Como precaución, el médico le pidió a Caparat que detuviese las excavaciones.

Podría ser algún tipo de trampa creada y desarrollada por los egipcios antiguos. El arqueólogo afrontó una seria decisión. O abandonar definitivamente la excavación, o continuar por su cuenta. Los otros ayudantes se negaron a prestarle servicios.

Temían contagiarse.

EL DESCUBRIMIENTO

En la plenitud de la investigación, Caparat atravesó largos túneles y sobrevivió a cualquier inconveniencia tanto climática como física.

Era común que la presión atmosférica fuese baja, lo cual le impedía respirar correctamente. Por esta razón trabajaba desde las 6 de la mañana hasta las 3 de la tarde. A posteriori se dedicaba a analizar los resultados y anotarlos en sus registros.

Una semana antes de que se venciese el lapso programado por el gobierno egipcio, Caparat halló lo que aparentaba ser el principio de una entrada. Marcó el borde superior con su instrumental, una pequeña escoba de mano le ayudó a limpiar el terreno. La tierra era espesa. No se dejaba manejar fácilmente. Caparat descubrió tres jeroglíficos entrelazados por lo que parecía ser un ramo de olivo. Tardó aproximadamente una hora en decodificarlos.

Los signos hacían referencia al faraón Keops y a sus condescendientes.

El arqueólogo -emocionado- se comunicó con el canciller francés. La excavación recibió apoyo directo del gobierno egipcio. El que antes era un simple soñador, era reconocido como un talentoso investigador.

Aunque todavía quedaba mucho por descubrir, Keops asombraría nuevamente al mundo.

LA TUMBA DE CRISTAL

Una centena de hombres y 61 días fueron suficientes para librar de obstáculos la preciada entrada.

La puerta yacía en buen estado. Mostraba una cantidad interesante de figuras, representadas en bajorrelieves de fino corte. Con la ayuda de un remolque externo se logró derribar las trabas que impedían abrirla. Los científicos cubrieron sus rostros con máscaras. Examinaron, con precaución, el lugar. Estaba completamente oscuro.

Caparat fue el primero en avanzar en tierra desconocida. Para su sorpresa, la recámara contaba con dos círculos de unos 20 centímetros (aproximadamente) ubicados en ambos extremos del sitio por los cuales ventilaba aire. La sorpresa no se hizo faltar.

Caparat se topó con una gigantesca tumba de cristal macizo. Llamó a sus asistentes -que habían regresado a sus tareas luego de la buena nueva- y les pidió que alumbrasen el objeto a la brevedad.

Para el horror de muchos, un cadáver yacía dentro de la tumba. Y no parecía ser humano.

El cuerpo fue depositado en una ambulancia especial y fue llevado a un centro de investigaciones donde se practicarían diversos exámenes.



La tensión creció cuando Caparat halló entre las piernas del ser un papiro antiquísimo. Abandonó el lugar y se retiró a sus aposentos en un hotel. El ministro egipcio de relaciones exteriores se hizo presente en la excavación junto con la fuerza policial.